Hay peleas que hay que darlas, pase lo que pase, y por qué no, hasta es necesario que se den.
Ayer, como todo hipócrita cobarde, Jairo López Covo, fue al programa para donde salen corriendo todos los hampones de cuello blanco, que quieren difamarme, y utilizando la bochinchera estrategia de referirse a un tema sin decir nombre, para después decir, como toda buena chismosa, yo no dije nombres, se refirió a este programa.
Siento un extremo placer de que esto haya sucedido.
Primero que todo me ratifico en lo que dije: Jairo López Covo tiene por costumbre difamar, atacar e intrigar en contra de las personas que se convierten en sus contrarios políticos. Y es un maestro de la hipocresía y de la intriga. Te destroza toda tu reputación y honra en una noche y al día siguiente, con la más cínica frialdad, te hace ver que él fue quien te defendió y sindica del ataque a otros.
Como lo expresé, me ratifico en lo que dije, en escenarios públicos se refiere de manera despectiva y vulgar a Juan Manuel López Cabrales. Y ni hablar de otras personas.
Pero le doy gracias a la vida que este ‘Gran Varón’ haya hecho este movimiento.
Respetados oyentes, no importa que me vea atacado por estos hampones si a cambio ustedes descubren lo que he tratado de mostrarles desde que existe este programa, la verdadera y asquienta piel de estos, dizque, políticos de Córdoba. Hoy estamos conociendo al hampón de la política que cobra 700 millones y exige, además, la Secretaría del Interior Departamental, por cuatro años, por apoyar a un candidato a Gobernación.
Apreciados oyentes, esto es lo bueno de este programa, que ha logrado hacer ver la verdadera piel delincuencial de la clase política de aquí. Ese perturbado que escucharon ayer es la representación real de la clase política de Córdoba. Es el excelso representante del Partido Conservador de Córdoba. Partido político que le tiene un temor reverencial a este mercader y hampón de la política. Julio Manzur, Nora García, Marcos Daniel Pineda y David Barguil le tienen un pavor reverencial.
Aquí no le tenemos miedo, le tenemos asco. Nos causa repugnancia. Y nos alegra, que por fin, este hampón de la política haya mostrado quién es.
Miren ustedes semejante y asquienta unión: los ‘pasquineros’ de Sahagún y de la U, unidos con lo más despreciable y vividor de la política y del Partido Conservador, Jairo López Covo, ‘El Gran Varón’.
Se los reitero esa es nuestra clase política, esos son los que piden el voto por candidatos y se hacen llamar políticos. Hay una Feria de Artesanías en la Cárcel Las Mercedes y están celebrando la fecha de su patrona, me quedo con muchos internos de allá que verdaderamente están pagando su deuda con la sociedad y no con estos hampones que están libres y les dicen dizque doctor.
Un día, en este gobierno, me dijo con el más vulgar desparpajo, que él tenía un cuaderno en donde anotaba a todos los periodistas a los cuales tenía una mensualidad, me mostró un cuaderno. Esta práctica es propia de los delincuentes y de los mafiosos, el de apuntar todo para sacarlo después.
Lo han dicho y demostrado sicólogos y siquiatras, todas esas personas que viven diciendo que todos los demás hombres son maricas y que todas las mujeres son bandidas, tienen verdaderos problemas. Con ese ataque lo que están es tratando de ocultar sus verdaderas debilidades.
No sabía que este político del Partido Conservador, no sólo es un hampón de la política sino un vulgar homofóbico.
Que dicho sea de paso, hay que decirle que por el solo hecho de ponerse a tener ‘querías’ en varios municipios ello no es prueba de hombría ni de ser ‘macho probao’, como dice él que lo es, ‘macho probao’.
Le agradezco a todos los pensionados de la extinta Electrificadora de Córdoba que me han llamado a contarme las más sórdidas historias y romances de López Covo con trabajadores de esa desaparecida empresa. Gracias, pero eso hace parte del libre desarrollo de la personalidad. Y no voy a entrar en detalles de los enredos de ‘El Gran Varón’.
Lo cierto y claro es que los monterianos y cordobeses no estamos obligados a pagarle la manutención de sus diferentes amantes, hombres y mujeres, que los pague de su sueldo no de la plata de nuestros impuestos.
Por último, quiero dejarle en claro a López Covo que a mí no me cargan toros y ni en mi casa anidan caimanes, como lo hacen en sus diferentes hogares.
Respetados oyentes, perdónenme, ustedes no me regalan estos minutos para escuchar este tipo de comentarios, pero era obligatorio que ustedes corroboraran quiénes son los, dizque políticos, del Partido Conservador, que quieren quedarse con el poder.
Y ustedes están obligados a conocer quiénes son los políticos.
Quién ha dicho que esto de la cosa pública no le concierne a los ciudadanos? Que son los verdaderos dueños de la política. O es que acaso no son ellos los que votan.
Y ustedes no pueden votar por hampones de la política. Lo mínimo que pueden exigir es que estos sean respetuosos y decentes.
Pero esto es mucho pedir a resentidos, mercaderes y hampones de la política.
Qué vergüenza de Partido Conservador, tener en sus filas a este ‘Gran Varón’.
