Por si se atreven

NOTA DE LA REDACCIÓN:

Esta columna fue escrita el 6 de octubre de 2007. Y la ‘resucito’ para darle más contexto a los visitantes de este Blog, que van a tener la oportunidad de leer, para este sábado 23 de mayo de 2009: CARTA ABIERTA AL ALCALDE DE MONTERÍA.


Por Toño Sánchez Jr.

A continuación voy a convertirme, en lo que uno como periodista, siempre debería ser, vocero de los ciudadanos. Los americanos llaman a este estilo, ‘Periodismo Público’. Y consiste simplemente en colocar a los ciudadanos en el medio de la información, entre la fuente y la noticia. En pocas palabras, “unir al periodista con el público al que sirve”, para que sea el periódico el que represente verdaderamente al ciudadano frente a sus gobernantes.

Esto es, no permitir a los mandatarios de turno y secretarios de despacho ’agendar’ la información que recibirá la comunidad al día siguiente. Por ejemplo, para esta época electoral se debe hablar de una “agenda del ciudadano”, y no de la agenda del candidato. Los verdaderos protagonistas no son los aspirantes a los cargos de elección popular, sino los votantes. Ya que estos últimos son los que sufren y viven todos los problemas de su cuadra, barrio y comuna.

Por esta razón es que me convierto hoy en vocero de todos esos ciudadanos, para expresarles a todos los aspirantes a la Alcaldía de Montería, que le hablen a los monterianos cómo enfrentarán y solucionarán los siguientes problemas:

Espacio Público, Mercado y Movilidad: en Montería nadie respeta el espacio público, pero ningún mandatario se atreve a recuperarlo. Qué decirle a todas esas personas que lo han invadido por años y que mensualmente le pagan a Electrocosta por energía (¡!) ¿Qué alternativas hay para esas personas, diferentes a las represivas?, ¿qué va a pasar con los mercados del Centro y del Sur?, ¿qué se va hacer con las instalaciones del primero?, ¿podrán los ciudadanos de Montería volver a caminar por los andenes de la ciudad? Mientras que por la Ronda de la Avenida Primera se disfruta de la tranquilidad de la naturaleza, al frente lo que hay es desenfreno y escándalo; ni hablar de invasión al espacio público. ¿Por qué no recuperar las alamedas que hay a los lados de los canales del sur de la ciudad, para convertirlos en senderos peatonales y de recreación infantil? No puede faltar el tema del ‘mototaxismo’, qué alternativas presentan para desestimular el uso de este vehículo. Todos los que conducen un carro saben la hora y conocen los sitios en donde se forman los ‘trancones’; pero los únicos que no lo saben son el Secretario de Tránsito, los agentes y la Policía de Tránsito… y el Alcalde. Usted, ¿qué hará para mejorar y educar a los conductores de la ciudad?, ¿permitirá que los camioneros sigan usando las calles de la ciudad como parqueaderos públicos? Hasta aquí en este tema.

Prostitución y maltrato infantil, y violencia intrafamiliar: no se puede pensar en una futura sana sociedad, si no hay políticas claras y firmes para detener, controlar y castigar estos terribles males que agobian a los colombianos, en especial a las regiones en donde la pobreza, la miseria y la indigencia es el común denominador, como sucede en realidad en Montería. Muchos alcaldes piensan que sólo el cemento es lo que da la categoría de ser buen gobernante, y están bien equivocados. Mientras no tomen este tipo de problemas no estarán aportando nada a la sociedad.

Pobreza y desempleo: muchos monterianos quieren leer, y escuchar de sus aspirantes, los proyectos y planes que han establecido en sus Programas de Gobierno (¡¿?!), para reducir la pobreza y el desempleo de la ciudad. No convirtiendo su administración en una alcaldía ‘asistencialista’ y repartidora de migajas. Creo que ya está bueno de vivir de las necesidades de los demás. Un ciudadano me contaba que a muchos políticos no les gusta buscar o encontrar salidas a estos problemas para poder tener a esta población arrodillada. Me cuesta creer que es así, pero considero que, con tanta mentira que se les ha dicho a estos estratos, lo que se está haciendo es acrecentar una bomba social de tiempo, que cuando estalle no debe sorprender a nadie. Con el agravante de que todos, absolutamente todos, seremos responsables. No sólo lo serán los pusilánimes que los engañaron en campaña.

Desplazados y desmovilizados: no importa como los llamen, pero son personas que necesitan de políticas serias y claras de apoyo. El desprecio con que se mira a esta población, raya con la crueldad. Allí es donde está el verdadero caldo de cultivo para la delincuencia. Los aspirantes sólo se acercan a estas vulnerables comunidades semanas antes de las elecciones. No conozco ningún Programa de Gobierno que explique cómo se va a trabajar con estas personas que la guerra colombiana ha golpeado.

Deporte y recreación: aquí en Montería los gobernantes de turno han creído que porque una empresa tira una plancha de concreto y encierra un parque, ya se está trabajando en el deporte. Una cosa son los escenarios e infraestructura física para el desarrollo de las diferentes disciplinas, y otra es la práctica deportiva y recreativa. Ningún aspirante ha presentado un programa de cómo preparar a nuestros jóvenes a que lleven una vida saludable con el deporte. Como tampoco han dado a conocer qué proyectos tienen para recreación. Mientras tanto, lo más grave es que todas las zonas verdes de Montería, en donde ha existido o existe un parque, las cogen para colocar unas bancas, para sembrar una grama en la que nadie puede sentarse con su familia y para tirar una plancha de concreto que sirve de cancha de microfútbol. Todo esto sin consultar qué quiere verdaderamente la comunidad.

Se quedan muchos temas por fuera, pero éstos son algunos de los cuales quieren los ciudadanos conocer cómo los enfrentarán los aspirantes a la Alcaldía. La cuestión no es con retórica, sino con cifras y proyectos. Lo triste es que muchos de ellos no saben o ignoran estos problemas, pero sí conocen al dedillo el presupuesto anual de Montería y cómo es la ‘jugada’ con las concesiones y con la contratación.

No tuve en cuenta a los concejales, porque ellos sólo sirven para darles atribuciones al Alcalde de turno y negociar los Acuerdos, para más nada son útiles. Y si me equivoco, que me lo demuestren con indicadores sociales de gestión, que no incluyan balasto ni la pavimentación de 50 metros de calle. Como tampoco la ‘liga’ que le dan a los votantes cuando los molestan mucho después de elecciones.